lunes, 2 de mayo de 2011

Estocolmo a fondo...




Después de un abundante desayuno en el hotel, llegaron nuestras nuevas anfitrionas. Se llaman Simona e Inga, y vienen desde Vasteras a buscarnos pues esa es nuestra primera parada en este programa. Luego de una breve reunión para presentarnos y coordinar algunas cuestiones, partimos hacia el centro de la ciudad para conocer más en detalle algunos edificios, historias y lugares.
Dos señoras encantadoras que haciendo gala de una enoooorme cordialidad estuvieron a nuestra disposición todo el tiempo. Nos permitieron (pues no estaba en el planning del citytour) ingresar a un exclusivo shopping de la ciudad (sólo a ver, claro) y luego tuvimos que apurar nuestro paso para llegar a tiempo para el cambio de guardia en el Palacio Real. Realmente algo inolvidable, no tanto por lo magnífico del espectáculo sino por la tradición que involucra. Muchísimos turistas, como nosotros, abarrotaban la entrada del palacio. Aquí posteamos algunas fotos, personalmente verán muchas más.
Desde allí, una vez más, apuramos el paso pues nos esperaban en el Parlamento. Allí nos recibió Jessica, que a pesar de ser muy joven pertenece al partido conservador y es una parlamentaria de Suecia (algo así como nuestros diputados). Encantadora en el trato, ella era una huérfana de Corea del Sur que fue adoptada por una familia sueca cuando tenía apenas unos meses de vida, y aquí está, convertida en una de las máximas autoridades del país. Compartimos con ella entre risas y mucha información, esta bella historia que habla a las claras de las posibilidades que Suecia le ha dado a tantas personas de todas partes del mundo. Por cierto, está lleno de chilenos que huyeron en su momento de la dictadura y que han hecho su vida aquí en Suecia. Tuvimos oportunidad de hablar con un taxista chileno que vive aquí hace 23 años y que nos contaba cuán dificil le resulta aún adaptarse a una cultura tan diferente, precisa y eficiente. Habla perfecto sueco, eso ya es bastante pues se trata de un idioma realmente complicado de pronunciar.
Luego de recorrer el Parlamento, (incluso el salón de sesiones) y aprender más sobre este país y su sistema de gobierno, agradecimos efusivamente a Jessica su tiempo (muy valioso) y nos dirigimos con Simona e Inga hasta la parte vieja de la ciudad. Llena de tiendas muy pintorescas, las pequeñas callejuelas de adoquines y los edificios de colores son esa típica postal europea que todos hemos visto tantas veces.
Así llegamos a un restaurante italiano donde comimos obviamente, pasta. Lasagña, tortellini, fetucchini y otras exquisiteces por el estilo para reponer las energías de una caminata realmente extensa.
Luego tomamos un taxi (ahí hablamos con el chileno) hasta el hotel para recoger nuestras cosas y nos dirigimos a la Estación Central donde abordamos un tren a Vasteras. Describir las comodidades, el silencio y la velocidad del tren, resultaría empalagoso.
Durante el viaje atravesamos densos bosques, enormes campos verdes, carreteras en perfecto estado, todo con una calefacción sofocante ya que afuera la temperatura no supera los 10 grados. Brrrrrr.
Llegamos a la Estación Central de Vasteras donde nos esperaba cada una de las familias donde pasaremos los próximos días. Cordialidad, respeto, auténtico interés por Argentina y su gente, son algunos de los ingredientes que pronto descubriríamos cada uno en veladas inolvidables de charlas a la luz de las velas en esta hermosa ciudad de Suecia.....

1 comentario:

Cako dijo...

Hermosas fotos...de una hermosa experiencia...sacándole provecho al contraste sociocultural...y las conclusiones del caso...Suerte Lety! Saludos al grupo!